La noria aparece ya documentada en 1882, a partir de la instalación de las religiosas Hijas de San José. La noria estaba vinculada a las necesidades de la congregación.
Ahora completamente reformada se puede ver el pasillo o carrera por la que andaba el burro o el animal giraba para extraer el agua.
Algunos elementos no se conservan como estaban antiguamente. Por ejemplo, el aljibe se ha dejado con una profundidad de 30 cm parar evitar accidentes.
