La ermita de Nuestra Señora de Oskia, está situada a la orilla de la carretera de Ororbia a Irurzun, bajo una gran peña, cuya parte trasera está horadada para un túnel del ferrocarril.
Fue erigida en 1570 y está dedicada a Nuestra Señora del Pilar. aunque muy antiguamente su advocación fue la del Apóstol Santiago. Según cuenta la leyenda, esta dedicación a la Virgen del Pilar está relacionada con un milagro otorgado a un viajante de Zaragoza. Este señor, armero, viajaba por los complicados caminos de Araquil, se puso enfermo y sintiéndose morir invocó a la Virgen del Pilar obteniendo su curación.
Situada en pleno desfiladero de Osquía, que servía de puerta de entrada a la Cuenca y la separación natural del clima mediterráneo de Pamplona y el clima atlántico del Valle de Araquil.
No tiene muy buen acceso para llegar andando. Aunque hay un camino que parte de Atondo es necesario caminar por la carretera sin arcén hasta llegar a ella.
Sorprende la pila de agua bendita colocada casi al ras del suelo en la ventana que da a la carretera. Signo del paso de los siglos.