El Cerco está compuesto por un cinturón de gruesos muros de sillería, donde se jalonan grandes torreones. Originalmente tenia 14 de estos torreones, hoy sólo quedan 9 en pie y los cimientos de otros 3.
Se puede acceder libremente al recinto del cerco muy bien conservado, además el ingreso al cerro donde está situado se puede realizar por cualquiera de sus dos portales que todavía quedan en pie.
Desde sus murallas grandes vistas nos esperan de los montes que rodean Artajona.