Se encuentra a unos 20 minutos de Vidaurreta siguiendo el camino de Belascoáin. En una pequeña explanada rodeada de algunos árboles y situada donde antiguamente se supone que hubo un antiguo castro.
Con una cruz de hierro situada delante de su puerta, tiene anexado un pequeño refugio, desde el cual se puede ver el interior de la ermita. Una pequeña hornacina y un altar es lo más destacado de su interior. Es de humilde construcción con tejado a dos aguas. Su fiesta se celebra el 10 de julio.
Según las inscripciones que figuran en la ermita, esta se reformó en en 1971. Sin embargo la cruz de hierro data del año 2000.
