Sin embargo es posible hacerlo y recordar los tiempos pasados donde las gentes de Orcoyen bajaban al puente para recibir a San Miguel de Aralar. O las mujeres de la localidad acudían a la orilla del río a lavar la colada.
Fue un puente de mucha importancia ya que facilitaba el acceso a Pamplona a los habitantes de los pueblos de los Valles de Goñi, de Ollo...
A finales de los años 80, fue restaurado con una nueva calzada y la construcción de los desaparecidos pretiles.
